¿Cómo controlar la incontinencia intestinal?
Para la mayoría de las personas, no poder confiar y controlar su cuerpo es devastador.
De hecho, cualquier persona que haya tenido que lidiar con la incontinencia intestinal sabe que tanto las consecuencias físicas como psicológicas tienden a limitar su vida y que les impiden hacer las cosas que quieren. Afortunadamente, hay ayuda disponible.
El primer paso incluye cambios en el estilo de vida y uso de medicamentos, sin embargo, esto puede no ser suficiente para controlar la incontinencia intestinal. A veces, se necesitan productos de contención, como tapones u obturadores anales para controlar las fugas o los escapes de heces. Un obturador anal puede parecer intimidante, pero usarlo tiene ventajas, pues actúa sellando el recto y evitando la salida de las heces, y además puede reducir el riesgo de olores y los problemas en la piel de alrededor.
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Si se necesitan tratamientos adicionales, una opción es la irrigación intestinal, también llamada irrigación transanal (ITA). Es un método mínimamente invasivo para vaciar eficazmente el intestino mediante la introducción de agua tibia en el recto, a través de una sonda rectal o de un cono.
¿Qué es la irrigación intestinal o TAI?
El tratamiento con irrigación intestinal, a veces también llamada irrigación transanal (TAI), es una opción cuando otros tratamientos como medicamentos, cambios en la dieta y líquidos no han ayudado.
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